miércoles, 22 de marzo de 2017

¿Qué determina el valor de tu libro?

¿Publicaste un libro que no vende tanto como quisieras?

Estas reflexiones te ayudarán a recordar la satisfacción que sentiste al publicarlo.

No eres el único

La auto publicación permite que cualquier archivo sea publicado sin necesidad de haber sido corregido por editores profesionales de libros. Eso hace que haya una gran variedad en cuanto a la calidad de los libros autopublicados. Lamentablemente hay muchos libros publicados con errores de ortografía, puntuación y gramática.

Recuerda por qué lo escribiste

Si te animaste a escribir un libro en primer lugar es porque estabas convencido de querer contar una historia. Imagina que no lo hubieses escrito. ¿Te sentirías mejor ahora? Estoy segura de que el efecto terapéutico de haber contado una historia es algo importante para tu bienestar.

Los números son relativos

Si una sola persona disfrutó leyendo tu libro, valió la pena el trabajo. El valor de un libro no se mide en términos de ejemplares vendidos. El éxito depende de lo que tú esperabas al escribirlo. Sincérate contigo mismo y busca dentro de ti la verdadera satisfacción de haber publicado un libro que, aparentemente, nadie lee.

Nadie comenta

Parece que tus amigos a quienes has regalado el libro se olvidan de comentarte. Son pocos los que mencionan que comenzaron a leer pero aún no terminan, pero que les gustó lo que leyeron hasta ahora. No asumas que el libro es malo porque nadie lo promueve. Pocas personas leen hoy en día, muchos se sienten inseguros al escribir auunque sea un breve comentario.

Pasa el tiempo

Así pueden pasar semanas, meses, años. Concluyes que el libro es un fracaso. Pero yo te digo que no. Si una sola persona comprendió tu mensaje, valió la pena escribirlo.

Un ejemplo

Mi autobiografía novelada me acerco a dos miembros de mi familia, sin esperarlo. Lo mejor, en mi caso, han sido esas reacciones inesperadas y los comentarios de quienes no me conocen, pero se sintieron identificados. Y siempre están los eternos admiradores, los aduladores y los entusiastas. Ellos complacen mi ego y les agradezco, he disfrutado de cada comentario, aunque no lo hayan escrito en Amazon.  

Tu legado

Si estás desanimado con la audiencia de tu libro y los pocos comentarios que te han escrito, piensa en el tesoro de dejar como herencia tu percepción acerca de determinados temas. Seguro será apreciada en el futuro, tal vez por alguno de tus descendientes hambriento por entender su procedencia, sus experiencias heredadas, o por alguien sin relación consanguínea contigo, pero cuya esencia vibra junto a la tuya.

¿Ves como sí valió la pena publicar esa idea? ¿Estarías más contento con un manuscrito engavetado o con una idea reprimida en tu mente?

Comparte conmigo en los comentarios. Espero tu opinión o tu experiencia.

Cariños cibernéticos,

Verónica

No hay comentarios.:

Publicar un comentario